De FITUR a Anato 2025: El reto de la promoción en ferias
- Milka Hernández
- 3 mar
- 2 Min. de lectura
La participación en ferias internacionales como FITUR y Anato es fundamental para la promoción de destinos turísticos, pero también representa un desafío estratégico para empresas y gobiernos. No se trata solo de asistir, sino de hacerlo con una planificación estructurada que garantice visibilidad, atraiga inversiones y posicione la marca en mercados clave.
Para República Dominicana, su presencia constante en estos eventos reafirma su compromiso con la promoción turística a nivel global. Sin embargo, cada feria requiere meses de preparación, alianzas estratégicas y una inversión considerable para asegurar no solo una participación destacada, sino la generación de oportunidades de negocio reales y sostenibles.
Las empresas del sector enfrentan el reto de competir con productos innovadores y con la presencia consolidada de grandes jugadores de la industria, adaptándose a tendencias cambiantes y a las expectativas de un público cada vez más informado. Ya no basta con estar en un stand atractivo y dinámico; es imprescindible llegar con objetivos claros, estrategias definidas y una propuesta diferenciadora. Es necesario exhibir no solo un producto o servicio, sino un destino con sus atributos ecoturísticos, garantías de seguridad y una comprensión profunda del mercado al que se quiere impactar para lograr conexiones valiosas y resultados tangibles.
En este contexto, entender el papel de las nuevas tecnologías se ha convertido en un factor determinante para maximizar el impacto en ferias internacionales. Las herramientas digitales, desde plataformas de inteligencia de datos hasta la realidad aumentada, permiten mejorar la experiencia del visitante, optimizar la segmentación del público y potenciar la visibilidad de una marca o destino más allá del evento físico. La integración de estrategias digitales con las acciones presenciales amplifica el alcance de la participación en ferias, así como también facilita la medición del retorno de inversión y la consolidación de relaciones comerciales más efectivas.
El éxito en estos encuentros debe medirse más allá de las reuniones programadas o los cócteles de networking. La clave está en transformar la presencia en ferias en un pilar de crecimiento sostenido, donde cada participación contribuya a la evolución estratégica de la empresa o destino en el mercado global.